Opositar para aspirantes. Primeras dudas.

 Si es la primera vez que te planteas presentarte a las oposiciones de maestros, bienvenido al grupo de los "aspirantes". Estar en este grupo no es fácil. Al principio te sentirás muy perdido y desmotivado pensando que no tienes opciones, ya que en la mayoría de Comunidades Autónomas la lista de interinos es larga. Pero, por algún lado hay que empezar, todos ellos fueron en algún momento aspirantes.

Con este post queremos ayudarte a despejar algunas dudas que surgen cuando nos planteamos opositar. La primera de ellas suele estar relacionada con si merece la pena el proceso de oposición, si estamos realmente seguros de querer ser maestros en la escuela pública o si podemos buscar otras alternativas. Esta es una reflexión fundamental. Ser maestro en la escuela pública tiene ventajas, pero también grandes desafíos. Podrán destinarte lejos de casa, es posible que debas mudarte, los recursos son escasos en la mayoría de centros, las ratios son altas y existen zonas más desfavorecidas en las que encontrarás grandes conflictos. En general, hoy en día, la labor del maestro supone un gran reto y en muchas ocasiones nuestra profesión no está suficientemente valorada.

Si a pesar de todo ello, decides dedicarte a la docencia, entonces debes tener claro que opositar requiere dos cosas imprescindibles: TIEMPO y ESFUERZO. Para disponer de tiempo debes organizarte adecuadamente, repensar tus rutinas y establecer horarios realistas que puedas cumplir.

En cuanto al esfuerzo, depende en gran medida de la red de apoyos con la que cuentes y de tu motivación. Ser constante es más importante que memorizar muy bien en poco tiempo. La constancia te ayuda a fijar los conocimientos, reelaborar la información día tras día e interiorizar el mensaje.

Una vez que seamos conscientes del cambio que supone en nuestra vida la aventura de opositar, es el momento de pasar a la acción. Empieza por decidir en qué Comunidades vas a presentarte y la especialidad a la que quieres optar. No siempre la especialidad que elegiste en la universidad ha de ser la especialidad por la que oposites. Puedes cambiar si crees que tendrás más posibilidades por otra especialidad o si crees que te gustaría más ser maestro de Educación Física que de Educación Primaria. Consulta los requisitos en la convocatoria para ver si los cumples. 

Una vez decidida la especialidad y la Comunidad Autónoma, es el momento de consultar las convocatorias para definir el tipo de pruebas a las que deberás enfrentarte. Existen comunidades en las que se realiza una prueba de cultura general o de conocimiento del currículo en las diferentes áreas. Existen otras en las que directamente se abordan los 25 temas que componen el temario oficial y un supuesto práctico, además de la programación y la unidad didáctica. En algunas comunidades la parte del tema se realiza de forma oral y en otras, escrita. 

Una vez tengas claro cómo has de realizar cada una de las pruebas, comienza la fase de estudio. En Maestros de Escuela siempre os recomendamos, además del temario, estudiar y trabajar directamente con la normativa. Leer las diferentes concreciones normativas, subrayarlas y conocer los términos más importantes nos ayudará especialmente con las pruebas de supuesto práctico y en la elaboración de la programación y la unidad. El currículo es la base de nuestra labor docente y desconocerlo es algo que un buen opositor no debe permitirse. Aún así, sabemos que no es fácil lidiar con los términos de la legislación, por lo que un buen resumen de la misma puede ayudaros a comprenderla mejor. 

Una de las principales dudas de los opositores que comienzan es ¿dónde conseguir el temario? Si bien en la red circulan muchos temas de acceso libre y gratuito, la mayoría no están actualizados o son muy escuetos. Hay personas que eligen preparar la oposición con una academia, sin embargo, últimamente vemos como los precios son desorbitados, llegando a pagar 180 o 200€ al mes, por un servicio que en ocasiones no es adecuado, pues la masificación de algunos centros de estudios provoca que ni siquiera realicen un adecuado seguimiento individual del alumnado.
Nosotros os recomendamos adquirir un temario base y complementarlo con vuestras aportaciones, derivadas de lecturas actualizadas y con propuestas didácticas y pedagógicas interesantes. De esta forma destacaréis en las pruebas y la inversión económica no será desmedida. 

Un buen temario contendrá índices llamativos y actualizados, referencias a la normativa vigente, a autores actuales, con propuestas didácticas y pedagógicas actualizadas, desde un enfoque inclusivo y en base a los retos del siglo XXI recogidos por la Agenda 2030. Si quieres información sobre nuestro temario, contacta con nosotros y recibirás una pequeña muestra.